De cómo los Reyes Sajones Octa y Eosa fueron liberados y del fracaso de la embajada a Malahaut.
Sir Lady Freya, Sir Lady Astrid y Sir Baelor, de patrulla por el sur de Salisbury, recibieron informes de un grupo de labriegos acerca de que dos docenas de caballeros mercenarios sin identificar habían pasado al galope por la zona. Dieron aviso en Sarum, donde Sir Elad el Mariscal preparó una patrulla de veinte caballeros para detenerles. El curtido mariscal asignó el mando de uno de los grupos de búsqueda a Sir Lady Freya, que lideró un grupo de caballeros formado por ella misma, Sir Lady Astrid, Sir Baelor y Sir Bar.
"Seguidme chicos, he demostrado en numerosas ocasiones mi buen juicio." - Sir Lady Freya, asumiendo el mando con naturalidad.
Sir Baelor, el mejor cazador de todos ellos, dirigió la búsqueda. Tras un par de días, cruzaron hasta el vecino ducado de Silchester. Finalmente, decidieron que los mercenarios se dirigían a la capital del ducado, la ciudad de Silchester y galoparon hacia allí para dar aviso. Durante la carrera, el caballo de Sir Bar se hirió y el caballero se quedó atrás.
Los restantes caballeros llegaron a Silchester de noche y pidieron entrar en la ciudad, pero mientras los guardias decidían qué hacer, oyeron ruidos de lucha. Al ir a investigar vieron a los caballeros mercenarios que perseguían luchando contra soldados de la ciudad, mientras media docena de jinetes escapaban. Los caballeros de Salisbury no lo dudaron y decidieron perseguir a los jinetes.
Al darse cuenta de que estaban siendo perseguidos, tres de los jinetes dieron media vuelta y se lanzaron a la carga. Tras la embestida inicial Sir Baelor despachó de un contundente golpe a su adversario y se apresuró a ayudar a Sir Lady Freya, que combatía con un hábil enemigo. Entre los dos dieron muerte al rival. Sir Lady Astrid, mientras tanto, dejó inconsciente al tercero. Al quitarles los yelmos descubrieron que eran sajones, y Sir Lady Astrid reconoció en su rival a su... hermana. La caballero entró en cólera al ver a la persona que tanto mal había causado en sus tierras con sus continuas incursiones y antes de que nadie pudiera intervenir la asesinó con furia.
Mandaron a sus escuderos a Silchester con el único de los sajones que había quedado con vida y reanudaron la búsqueda, pero perdieron el rastro por la noche y al día siguiente volvieron agotados a Silchester.
Allí Sir Bar había interrogado al herido, el cuál murió a causa de las heridas y la tortura, pero descubrieron que su líder era el Praetor Syagrius, que odiaba a Uther después de haber sido traicionado por él años atrás en la Galia. Sus mercenarios le habían ayudado a liberar a los reyes sajones Octa y Eosa para que destruyan el reino de Uther. Ellos eran los jinetes que escaparon.
"¿Syagrius? Yo soy más de Sir Dulcius." - Sir Baelor en el Club de la Comedia.
Octa y Eosa consiguieron escapar hasta los reinos norteños de Nohaut y Deira y allí comenzaron a reagrupar a sus fuerzas.
A las semanas el Conde Roderick fue enviado por el Rey Uther a Malahaut para forjar una alianza con el Rey Heraut que se pudiera oponer a la amenaza del creciente ejército sajón. Sir Elad, el Mariscal, escogió personalmente a los escoltas del Conde, entre los que se hallaron Sir Lady Freya, Sir Lady Astrid, Sir Baelor y algunos de los mejores caballeros de Salisbury.
Cuando llegaron a Eburacum, en el reino de Malahaut, descubrieron otras muchas embajadas de otras regiones habían llegado ya a la corte del Rey Heraut, incluyendo numerosos sajones que observaban fríamente a la embajada de Salisbury. Cuando finalmente Roderick fue recibido por Heraut, los términos de la alianza propuesta por el Rey no eran amistosos para Logres y, de mal humor, el Conde dio la orden de volver a la corte de Uther, en Silchester.
En el camino de vuelta el séquito del Conde fue asaltado en una emboscada sajona. El combate fue atroz y los caballeros de Salisbury no consiguieron reorganizar sus filas tras el caos inicial. A pesar de la excelente actuación de Sir Lady Freya, Sir Lady Astrid y Sir Baelor, que consiguieron reducir a dos enemigos cada uno, la escaramuza fue una carnicería para los hombres del Conde. Más enemigos asaltaron a los caballeros y Sir Baelor cayó moribundo debido a numerosas heridas. El Conde Roderick, a su pesar, dio la orden de retirada. Sir Lady Astrid subió a la grupa de su montura el cuerpo inerte de Sir Baelor y los caballeros supervivientes huyeron como alma que lleva el diablo.
De la escolta del Conde sólo consiguieron salvar la vida nuestros tres caballeros y el propio Conde, que estaba herido de gravedad. Sir Baelor, sin embargo, no parecía que fuera capaz de sobreponerse a sus importantes heridas y las mujeres caballero opinaban que no sobreviviría a aquella noche. Sir Lady Astrid, que era la más acostumbrada a tratar heridas recordó todos los combates, las aventuras y los buenos momentos que había compartido con Sir Baelor, y se vió incapaz de actúar, sumida en la melancolía. A Sir Lady Freya le embargaron las mismas emociones, pero ellas fueron las que le inspiraron y, con maestría suma, atendió las muchas heridas del caballero. Sir Baelor no murió aquella noche y arrastrándolo en una camilla se apresuraron a volver a Silchester con el desánimo pesándoles en el corazón por haber perdido a tantos buenos amigos.
Una vez llegaron a la corte del Rey, el Conde Roderick informó de lo sucedido a un enfermo Rey Uther. Parece que la muerte del Príncipe Madoc y la desaparición de su joven hijo habían hecho mella en la salud del rey, que a partir de entonces se dejó ver poco en público.
Durante el invierno Sir Baelor se recuperó tras una larga convalecencia y, dando gracias a Dios, donó uno de sus señoríos a la iglesia britana, donde se asentaron unos monjes y fundaron un monasterio.
Sir Lady Astrid, tras muchos años de recibir incursiones sajonas al fin gozó de un poco de paz, hecho que atribuyó a haber matado a su hermana.
Pero inquietantes rumores llegaron del norte, pues se decía que los Reyes Octa y Eosa, con un enorme ejército a sus espaldas, marchaban hacia el sur.
Los Caballeros en el 493
Sir Baelor (Edad 29)
"Los caballeros de Salisbury siguen el rastro de unos Sajones hasta Silchester.
Allí,
detienen a unos cuantos Sajones pero no consiguen evitar que Octa y Eosa
sean
liberados de prisión por Syagrius. Sir Lady Astrid captura entre los sajones
a su hermana, a la que da muerte por haber asaltado sus tierras tantos años.
Semanas más tarde acompañan al Conde Roderick a las tierras de Malahaut
en una misión diplomática fallida y apenas consiguen salir con vida de una emboscada."
Semanas más tarde acompañan al Conde Roderick a las tierras de Malahaut
en una misión diplomática fallida y apenas consiguen salir con vida de una emboscada."
- Flavio Lucio Dextro, cronista.
Sir Lady Freya, Sir Lady Astrid y Sir Baelor, de patrulla por el sur de Salisbury, recibieron informes de un grupo de labriegos acerca de que dos docenas de caballeros mercenarios sin identificar habían pasado al galope por la zona. Dieron aviso en Sarum, donde Sir Elad el Mariscal preparó una patrulla de veinte caballeros para detenerles. El curtido mariscal asignó el mando de uno de los grupos de búsqueda a Sir Lady Freya, que lideró un grupo de caballeros formado por ella misma, Sir Lady Astrid, Sir Baelor y Sir Bar.
"Seguidme chicos, he demostrado en numerosas ocasiones mi buen juicio." - Sir Lady Freya, asumiendo el mando con naturalidad.
Sir Baelor, el mejor cazador de todos ellos, dirigió la búsqueda. Tras un par de días, cruzaron hasta el vecino ducado de Silchester. Finalmente, decidieron que los mercenarios se dirigían a la capital del ducado, la ciudad de Silchester y galoparon hacia allí para dar aviso. Durante la carrera, el caballo de Sir Bar se hirió y el caballero se quedó atrás.
Los restantes caballeros llegaron a Silchester de noche y pidieron entrar en la ciudad, pero mientras los guardias decidían qué hacer, oyeron ruidos de lucha. Al ir a investigar vieron a los caballeros mercenarios que perseguían luchando contra soldados de la ciudad, mientras media docena de jinetes escapaban. Los caballeros de Salisbury no lo dudaron y decidieron perseguir a los jinetes.
Al darse cuenta de que estaban siendo perseguidos, tres de los jinetes dieron media vuelta y se lanzaron a la carga. Tras la embestida inicial Sir Baelor despachó de un contundente golpe a su adversario y se apresuró a ayudar a Sir Lady Freya, que combatía con un hábil enemigo. Entre los dos dieron muerte al rival. Sir Lady Astrid, mientras tanto, dejó inconsciente al tercero. Al quitarles los yelmos descubrieron que eran sajones, y Sir Lady Astrid reconoció en su rival a su... hermana. La caballero entró en cólera al ver a la persona que tanto mal había causado en sus tierras con sus continuas incursiones y antes de que nadie pudiera intervenir la asesinó con furia.
Mandaron a sus escuderos a Silchester con el único de los sajones que había quedado con vida y reanudaron la búsqueda, pero perdieron el rastro por la noche y al día siguiente volvieron agotados a Silchester.
Allí Sir Bar había interrogado al herido, el cuál murió a causa de las heridas y la tortura, pero descubrieron que su líder era el Praetor Syagrius, que odiaba a Uther después de haber sido traicionado por él años atrás en la Galia. Sus mercenarios le habían ayudado a liberar a los reyes sajones Octa y Eosa para que destruyan el reino de Uther. Ellos eran los jinetes que escaparon.
"¿Syagrius? Yo soy más de Sir Dulcius." - Sir Baelor en el Club de la Comedia.
Octa y Eosa consiguieron escapar hasta los reinos norteños de Nohaut y Deira y allí comenzaron a reagrupar a sus fuerzas.
A las semanas el Conde Roderick fue enviado por el Rey Uther a Malahaut para forjar una alianza con el Rey Heraut que se pudiera oponer a la amenaza del creciente ejército sajón. Sir Elad, el Mariscal, escogió personalmente a los escoltas del Conde, entre los que se hallaron Sir Lady Freya, Sir Lady Astrid, Sir Baelor y algunos de los mejores caballeros de Salisbury.
Cuando llegaron a Eburacum, en el reino de Malahaut, descubrieron otras muchas embajadas de otras regiones habían llegado ya a la corte del Rey Heraut, incluyendo numerosos sajones que observaban fríamente a la embajada de Salisbury. Cuando finalmente Roderick fue recibido por Heraut, los términos de la alianza propuesta por el Rey no eran amistosos para Logres y, de mal humor, el Conde dio la orden de volver a la corte de Uther, en Silchester.
En el camino de vuelta el séquito del Conde fue asaltado en una emboscada sajona. El combate fue atroz y los caballeros de Salisbury no consiguieron reorganizar sus filas tras el caos inicial. A pesar de la excelente actuación de Sir Lady Freya, Sir Lady Astrid y Sir Baelor, que consiguieron reducir a dos enemigos cada uno, la escaramuza fue una carnicería para los hombres del Conde. Más enemigos asaltaron a los caballeros y Sir Baelor cayó moribundo debido a numerosas heridas. El Conde Roderick, a su pesar, dio la orden de retirada. Sir Lady Astrid subió a la grupa de su montura el cuerpo inerte de Sir Baelor y los caballeros supervivientes huyeron como alma que lleva el diablo.De la escolta del Conde sólo consiguieron salvar la vida nuestros tres caballeros y el propio Conde, que estaba herido de gravedad. Sir Baelor, sin embargo, no parecía que fuera capaz de sobreponerse a sus importantes heridas y las mujeres caballero opinaban que no sobreviviría a aquella noche. Sir Lady Astrid, que era la más acostumbrada a tratar heridas recordó todos los combates, las aventuras y los buenos momentos que había compartido con Sir Baelor, y se vió incapaz de actúar, sumida en la melancolía. A Sir Lady Freya le embargaron las mismas emociones, pero ellas fueron las que le inspiraron y, con maestría suma, atendió las muchas heridas del caballero. Sir Baelor no murió aquella noche y arrastrándolo en una camilla se apresuraron a volver a Silchester con el desánimo pesándoles en el corazón por haber perdido a tantos buenos amigos.
Una vez llegaron a la corte del Rey, el Conde Roderick informó de lo sucedido a un enfermo Rey Uther. Parece que la muerte del Príncipe Madoc y la desaparición de su joven hijo habían hecho mella en la salud del rey, que a partir de entonces se dejó ver poco en público.
Durante el invierno Sir Baelor se recuperó tras una larga convalecencia y, dando gracias a Dios, donó uno de sus señoríos a la iglesia britana, donde se asentaron unos monjes y fundaron un monasterio.
Sir Lady Astrid, tras muchos años de recibir incursiones sajonas al fin gozó de un poco de paz, hecho que atribuyó a haber matado a su hermana.
Pero inquietantes rumores llegaron del norte, pues se decía que los Reyes Octa y Eosa, con un enorme ejército a sus espaldas, marchaban hacia el sur.
Los Caballeros en el 493
Sir Baelor (Edad 29)
Caballero Celta Cristiano Britano, Caballero Abanderado, Gloria 6.150
TAM 15 DES 12 FUE 18 CON 13 ASP 11
Habilidades principales: Administración 17, Cazar 17, Batalla 17, Equitación 16, Espada 22, Lanzas 16
Rasgos y Pasiones famosas: Lujurioso 17, Valiente 16, Lealtad (Conde Roderick 16), Amor (familia) 16, Lealtad (Escudos de Sarum) 18
Posesiones:
- 7 señoríos en Salisbury
- Winterbourne Stoke
- Market Lavington (cedido a Sir Alastor)
- Marston (cedido a Sir George)
- Bodenham (cedido)
- Coombe Bisset (cedido)
- Over Wallop (cedido)
- Chitterne (cedido)
- 6 Caballeros Vasallos (Sir Alastor, Sir George y 4 más)
- Tesoro: 16 £ y 120 denarios
Caballera Sajona Cristiana Britana, Caballera Abanderada, Gloria 6.892
TAM 14 DES 12 FUE 14 CON 13 ASP 15
Habilidades principales: Percepción 16, Primeros auxilios 16, Encanto nórdico 16, Equitación 17, Espada 22
Rasgos y Pasiones famosas: Mundana 16, Honesta 16, Justo 16, Valiente 20, Lealtad (Conde Roderick) 20, Lealtad (Escudos de Sarum) 17, Lealtad (vasallos) 16, Amor (Sir Leo) 16, Odio (otros sajones) 17
Posesiones:
Posesiones:
- 3 señoríos en Salisbury:
- Dinton, Monxton (donado a Sir Leo)
- Grately (donado a Sir Leo)]
- 1 Castillo
- Dinton - Zanja y terraplén con foso - VD 4
- 2 Caballeros Vasallos (Sir Leo y otro)
- Tesoro: 40 £ y 200 denarios
Sir Lady Freya (Edad 29)
Caballera Sajona Cristiana Britana, Caballera Vasalla, Gloria 6.919
TAM 14 DES 11 FUE 14 CON 14 ASP 15
Habilidades principales: Nadar 18, Percepción 16, Primeros auxilios 15, Equitación 15, Espada 20
Rasgos y Pasiones famosas: Generosa 16, Honesta 16, Valiente 16, Lealtad (Conde Roderick) 18, Lealtad (Escudos de Sarum) 16, Odio (Sajones) 16
Posesiones:
- 1 señorío en Salisbury
- Newton
- 1 Castillo
- Newton - Zanja y terraplén con foso - VD 4
- Tesoro: 37 £ y 120 d
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